En más de una ocasión, Gabriela Mistral dedicó algunas palabras a las virtudes de diferentes animales, lo que le servía para demostrar qué tan cerca y lejos nos encontramos de ellos, tanto en lo bueno como en lo malo. Apelando a este recurso es que realizó una reflexión a partir del carácter de los chilenos con aquello que simbolizan los animales que aparecen en nuestro escudo nacional: el cóndor y el huemul. A continuación, un poco de heráldica y sociología mistraliana.
Menos cóndor y más huemul
Los chilenos tenemos en el cóndor y el huemul de nuestro escudo un símbolo expresivo como pocos y que consulta dos aspectos del espíritu: la fuerza y la gracia. Por la misma duplicidad, la norma que hace de él es difícil. Equivale a lo que han sido el sol y la luna en algunas teogonías, o la tierra y el mar, a elementos opuestos, ambos dotados de excelencia y que forman una proposición difícil para el espíritu.
Mucho se ha insistido, lo mismo en las escuelas que en los discursos gritones, en el sentido del cóndor, y se ha dicho poco de su compañero heráldico, el pobre huemul, apenas ubicado geográficamente.
Yo confieso mi escaso amor del cóndor, que, al fin es solamente un hermoso buitre. Sin embargo, yo le he visto el más limpio vuelo sobre la Cordillera. Me rompe la emoción el acordarme de que su gran parábola no tiene más causa que la carroña tendida en una quebrada. Las mujeres somos así, más realistas de lo que nos imaginan...
El maestro de escuela explica a sus niños: “El cóndor significa el dominio de una raza fuerte; enseña el orgullo justo del fuerte. Su vuelo es una de las cosas más felices de la tierra”.
Tanto ha abusado la heráldica de las aves rapaces, hay tanta águila, tanto milano en divisas de guerra, que ya dice poco, a fuerza de repetición, el pico ganchudo y la garra metálica.
Me quedo con ese ciervo, que, para ser más original, ni siquiera tiene la arboladura córnea; con el huemul no explicado por los pedagogos, y del que yo diría a los niños, más o menos: “El huemul es una bestezuela sensible y menuda; tiene parentesco con la gacela, lo cual es estar emparentado con lo perfecto. Su fuerza está en su agilidad. Lo defiende la finura de sus sentidos: el oído delicado, el ojo de agua atenta, el olfato agudo. Él, como los ciervos, se salva a menudo sin combate, con la inteligencia, que se le vuelve un poder inefable. Delgado y palpitante su hocico, la mirada verdosa de recoger el bosque circundante; el cuello del dibujo más puro, los costados movidos de aliento, la pezuña dura, como de plata. En él se olvida la bestia, porque llega a parecer un motivo floral. Vive en la luz verde de los matorrales y tiene algo de la luz en su rapidez de flecha”.
El huemul quiere decir la sensibilidad de una raza: sentidos finos, inteligencia vigilante, gracia. Y todo eso es defensa, espolones invisibles, pero eficaces, del Espíritu.
El cóndor, para ser hermoso, tiene que planear en la altura, liberándose enteramente del valle; el huemul es perfecto con solo el cuello inclinado sobre el agua o con el cuello en alto, espiando un ruido.
Entre la defensa directa del cóndor, el picotazo sobre el lomo del caballo, y la defensa indirecta del que se libra del enemigo porque lo ha olfateado a cien pasos, yo prefiero esta. Mejor es el ojo emocionado que observa detrás de unas cañas, que el ojo sanguinoso que domina solo desde arriba.
Tal vez el símbolo fuera demasiado femenino si quedara reducido al huemul, y no sirviera, por unilateral, para expresión de un pueblo. Pero, en este caso, que el huemul sea como el primer plano de nuestro espíritu, como nuestro pulso natural, y que el otro sea el latidode la urgencia. Pacíficos de toda paz en los buenos días, suaves de semblante, de palabra y de pensamiento, y cóndores solamente para volar, sobre el despeñadero del gran peligro.
Por otra parte, es mejor que el símbolo de la fuerza no contenga exageración. Yo me acuerdo, haciendo esta alabanza del ciervo en la heráldica, del laurel griego, de hoja a la vez suave y firme. Así es la hoja que fue elegida como símbolo por aquellos que eran maestros en simbología.
Mucho hemos lucido el cóndor en nuestros hechos, y yo estoy porque ahora luzcamos otras cosas que también tenemos, pero en las cuales no hemos hecho hincapié. Bueno es espigar en la historia de Chile los actos de hospitalidad, que son muchos; las acciones fraternas, que llenan páginas olvidadas. La predilección del cóndor sobre el huemul acaso nos haya hecho mucho daño. Costará sobreponerse una cosa a la otra, pero eso se irá logrando poco a poco.
Algunos héroes nacionales pertenecen a lo que llamaríamos el orden del cóndor; el huemul tiene, paralelamente, los suyos, y el momento es bueno para destacar estos.
Los profesores de Zoología dicen siempre, al final de su clase, sobre el huemul: una especie desaparecida del ciervo.
No importa la extinción de la fina bestia en tal zona geográfica; lo que importa es que el orden de la gacela haya existido y siga existiendo en la gente chilena.
Gabriela Mistral: Recados contando a Chile. Santiago de Chile: Editorial del Pacífico, 1957.
Muy buena información, me ha servido mucho y además es muy interesante, gracias.
ResponderEliminarQué bueno que te haya servido, Juan Pablo. Si te interesa o necesitas más información de Gabriela Mistral y de las temáticas de su prosa, te recomiendo revisar el libro que cité para este texto, "Recados contando a Chile" (Editorial del Pacífico, 1957), pues el prólogo y las notas de Alfonso Escudero son buenísimas. También te recomiendo "Recados para hoy y mañana" (Editorial Sudamericana, 1999) con estudio de Luis Vargas Saavedra -un gran mistraliano-. Finalmente, si quieres leer una excelente prosa poética, te sugiero los textos en prosa de "Desolación" (Nascimiento, 1923). Es de la prosa con más carácter que haya leído. Eso sí, fíjate bien al consultar el poemario, pues muchas ediciones de "Desolación" solo incluyen los poemas.
ResponderEliminarSaludos!
PS: Un sitio web nunca está de más. Este está dedicado 100% a Mistral y es sostenido por la Universidad de Chile: http://www.gabrielamistral.uchile.cl
por que gabriela mistral dice menos condor y mas huemul?
ResponderEliminara que se refiere?
tiene algun que ver con un suceso de ese tiempo?
Hola, Anónimo. El cóndor y el huemul son parte del escudo nacional de Chile. Lo que hace Mistral es identificar algunas características del pueblo chileno (o características que se le buscan inculcar) con la dualidad que suponen ambos animales: uno fiero, el otro dócil; uno orgulloso de su majestad, el otro con una calida timidez; el ave es la fuerza, el ciervo la delicadesa. Creo que a la luz de esta aclaración podrás leer el texto con una nueva comprensión. Espero haberte podido ayudar.
ResponderEliminar¡Saludos!
algunas preguntas
ResponderEliminarGabriela Mistral hace referencia a la escuela. cual seria la razon porque lo nombra.-
cual es la tesis que plantea en este ensayo
que caracteristicas se reconoce en este ensayo.-
& que pasa
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